Ayer domingo, hacía tan buen día que Patxi quiso pasar la mañana en el jardín.
Para divertirnos un rato estuvimos jugando al escondite y claro.... ganó Patxi.
No tenía muy claro cual iba a ser la primera entrada con la que colaborar en este estupendo lugar. Es como enfrentarse a un papel en blanco y decidir que escribir o dibujar, el primer trazo es el más difícil. Quería hacer algo especial, un homenaje al blog y a su creador y después de dar muchas vueltas a la cabeza se me ocurrió la idea de trabajar con Patxi. El resultado es este, un llavero del pequeño Patxi hecho con magic plastic.
El magic plastic es una hoja fina de plástico para usar en impresoras de inyección de tinta. Después se calienta en el horno y ese calor hace que la pieza encoja y se haga gruesa por arte de magia.
Como podéis ver el Patxi original medía aproximadamente unos trece centímetros antes de cocer.
Después de pasar por el horno Patxi mide unos cinco centímetros de largo y tiene un grueso de unos 2 milímetros, lo cual lo hace resistente.
Mi salamandra vino a conocer a Patxi. Yo creo que lo que la atrajo fue el rico cupcake de Patxi..... No temáis, se han hecho buenos amigos...